Skip to content Skip to sidebar Skip to footer

¿Qué es la creatividad? ¿Cómo surge? ¿Se puede enseñar a ser creativos? Fueron algunas de las preguntas lanzadas sobre la mesa este miércoles 13 de diciembre en el “Conversatorio de Juan: Procesos creativos en el arte y la ciencia”, realizado en el Campus Juan Gómez Millas. “La creatividad no se enseña, se libera”, dijo Maturana. “Ser creativo significa recombinar lo que ves”, siguió Gerard ‘t Hooft. “La creatividad muchas veces nace del error, de una palabra o del silencio”, concluyó Tijoux.

La Nueva Plaza Central del Campus Juan Gómez Millas fue el escenario de la inédita actividad organizada por la Facultad de Ciencias en colaboración con las facultades de Artes, Ciencias Sociales, Filosofía y Humanidades,  del Instituto de la Comunicación e Imagen, del Programa Transversal de Educación, del Programa Académico de Bachillerato y la Radio Juan Gómez Millas -todos miembros del renovado campus ubicado en Macul-, que convocó al Premio Nobel de Física 1999, Gerard ‘t Hooft, al profesor de nuestro plantel y Premio Nacional de Ciencias 1994, Humberto Maturana, y a la músico y cantante Ana Tijoux.

Con la moderación la periodista Soledad Onetto, el diálogo sobre ciencia, arte y creatividad, que se extendió por más de dos horas, tuvo una audiencia diversa que incluyó al Rector Ennio Vivaldi, la directora del ICEI, María Olivia Mönckeberg, el vicedecano de la Facultad de Ciencias, José Rogan, además de académicos, estudiantes, funcionarios y ciudadanos, quienes fueron sumando sus ideas y preguntas a los expositores.

“Existe una diferencia entre la información y la formación. A la primera se le puede poner un precio, pero a la segunda no, porque es una forma de ver la vida. La creatividad tiene mucho que ver con eso”, afirmó el Rector Vivaldi dando inicio a la actividad.

Tras las palabras de la máxima autoridad de la Casa de Bello, el profesor de la Facultad de Ciencias y uno de los impulsores del encuentro, Nicolás Libedinsky, dio la bienvenida al conversatorio, presentó a los participantes y lanzó la primera reflexión sobre el tema que convocó al diálogo. “Hay una cosa que los científicos vivenciamos como algo muy evidente: Que la creatividad es el corazón de nuestro trabajo. Los científicos vivimos en un mar de intuiciones e ideas, en el que la creatividad es central. Sin embargo, la gente en general asume la creatividad como algo de los artistas, entonces este es un momento para conversar sobre el tema y esperamos que sea maravilloso”.

“Estoy muy contenta de estar acá. En un ambiente que sólo nos habla de elecciones este es un paraíso, un paréntesis bonito para hablar de creatividad con tan estupendos invitados”, dijo Soledad Onetto dando el vamos a la conversación.

Creatividad: ¿De dónde viene, a dónde va?

“¿Se puede enseñar la creatividad?”, le preguntaron al biólogo Humberto Maturana. “La creatividad no se enseña, se libera. ¿Cómo se deja que los otros seres operen desde su condición básica y creatividad? Dejándolos ser, escuchando las preguntas de los niños, contestando las preguntas de los adultos. No es que se potencie la creatividad, se abre un espacio y según las circunstancias en que estamos es cómo se orienta. Los seres humanos podemos orientar la creatividad hacia lo más hermoso y hacia lo más terriblemente feo”, afirmó el académico sacando aplausos de la audiencia.

“La creatividad es algo muy universal, tanto en las ciencias como en la música y en todos los campos”, advirtió el Premio Nobel de Física agregando que ésta “utiliza las experiencias pasadas. Ves cosas de antes, gente que fue creativa antes que tú, y luego vas combinando esas cosas de otra manera y buscas nuevos patrones. Ser creativo significa recombinar lo que ves”.

“¿Cómo surge la creatividad?”, preguntó Soledad Onetto a Ana Tijoux. “Muchas veces nace del error, de una palabra, un documental o el silencio. Para mí la imperfección permite desarrollar una idea. Cada proceso creativo es distinto”, dijo la cantante.

En el transcurso de la conversación, ante las dos imponentes personalidades del mundo de la ciencia, Tijoux reveló: “Siempre fui pésima para la física, la matemática y la biología. Pero recuerdo que todas las veces que tuve la oportunidad de hablar con alguien que viene del mundo de las ciencias, fue como que me hablaran de una obra musical. La relación cómo se aborda el mundo de la ciencia desde un científico es muy similar a cómo un músico aborda su obra. Es la misma pasión en sus ojos. Creatividad para mí es ese lugar, la profunda pasión desde las entrañas, en que uno va desarrollando respuestas ante la duda permanente que uno tiene, ante esa necesidad que de entender el mundo y entenderlo a través de las obras”.

“La creatividad es un fenómeno espontáneo de los seres vivos, porque cada ser vivo tiene en el fondo que inventar su mundo en el momento en que empieza a vivir (…) Si yo le digo a alguien ‘tienes que ser creativo’, lo meto en una trampa. ¿Qué será ser creativo? El escuchar, el dejar aparecer, el respetar al otro, ese es el fundamento de la liberación de la creatividad”, concluyó Maturana.

Trasladando la conversación hacia el terreno científico, ‘t Hooft hizo notar al público que “que todo lo que usamos en nuestra vida cotidiana ha implicado un proceso creativo implementado por científicos”, y finalizando su intervención envió un mensaje a la audiencia: “La ciencia está alrededor nuestro. Mientras más entendemos, más felices somos, así que traten de aprender acerca del universo, de los humanos, de los lenguajes y de cómo funciona el mundo”, dijo el Nobel.

Fuente: www.uchile.cl